Y un día el tango se terminó.
Mesa abarrotada de apuntes, mate lavado, taza de café y galletitas dulces.
Cerebro colapsado x la excesiva lectura.
Campera y a caminar.
Eso me faltaba, caminar el barrio.
Encontrar el encanto en:
-las construcciones antiguas, con sus rejas, puertas y ventanas.
-las calles anchas.
-los viejos que se gritan "vamos Chicago", cuando se cruzan por la vereda.
-eso, viejitas y viejitos por todos lados.
-mirar vidrieras sin alejarme demasiado.
-tener todo a mano, o casi todo...
-Subir a mi casa en obra y ver cómo le da el sol.
Así empecé a mirar la parte del vaso lleno.
Vivir un rato en Mataderos no está tan mal.
martes
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Quiero ver fotos de esas calles.. y de los viejitos caminar..
ResponderEliminarno está nada mal porteñita, la clave es mirar esos detalles y disfrutarlos ;)
ResponderEliminarbesazooooo!